MADRID.- A partir del 1 de enero de 2015, los miembros de la Familia Real
no podrán viajar gratis en vuelos comerciales, ha anunciado la Casa del Rey.
Tal y como se comprometió el nuevo equipo de Felipe VI al mes de su proclamación,
la Casa del Rey ha establecido un código de conducta para todos los empleados
que trabajan para la Casa del Rey, quienes estarán obligados a mantener
"un comportamiento ejemplar que contribuya" a que los ciudadanos crean,
sientan respeto y confíen en la institución, han explicado en una
sesión informativa con medios de comunicación fuentes del Palacio de la
Zarzuela.
Sin confesar abiertamente que hasta la fecha miembros de
la Familia Real han disfrutado de billetes de avión gratuitos con
ciertas aerolíneas comerciales, un portavoz de la Casa ha dejado claro
que con la nueva regulación este tipo de ventajas no tendrá cabida.
"Los
miembros de la Familia Real no podrán aceptar regalos que por su alto
valor económico, finalidad o interés comercial o publicitario, o por la
propia naturaleza del obsequio, puedan comprometer la dignidad de las
funciones institucionales que tengan o les sean atribuidas", reza uno de
los principios generales de la normativa.
La
nueva norma impedirá asimismo, por citar otro ejemplo, que los miembros
de la Familia Real disfruten para su uso particular de vehículos que
les haya cedido alguna marca de automoción, ha insistido un portavoz de Zarzuela.
Aborda
asimismo las eventuales herencias que dejen en favor de algún miembro
de la Familia Real personas que no tengan una relación familiar con
ellos, como fue el caso del legado del empresario menorquín Juan Ignacio Balada.
"Podrán
ser aceptadas cuando así se considere procedente", dice la norma. Eso
sí, los bienes "deberán incorporarse a Patrimonio Nacional o ser
entregadas a instituciones públicas o entidades sin ánimo de lucro para
la consecución de fines de interés general, salvo que las disposiciones
incluyan un destino o finalidad específica cuyo cumplimiento se requiere
para su aceptación".
La Casa
del Rey ha elaborado un código de conducta para todos sus empleados,
tanto los altos cargos como el resto del personal cuyas nóminas pagan
otros Ministerios pero que están destacados en la Casa.
Estos
trabajadores deberán abstenerse de comportamientos que "puedan afectar
negativamente a la imagen y prestigio de la Casa"; no podrán intervenir
en operaciones financieras o negocios jurídicos con personas o entidades
cuando pueda suponer un conflicto de intereses con las obligaciones de
su puesto en la Casa y no podrán "prevalerse de su condición de miembro
de la Casa para obtener alguna ventaja en beneficio propio o de
terceros, ni aceptar trato de favor o situación que implique privilegio o
ventaja injustificada".
Estas son algunas de las 20 normas de conducta que establece el código, que no especifica sanciones en caso de incumplimiento.
Durante
la reunión, las fuentes de Zarzuela han confirmado que el asesor de las
Infantas Doña Elena y Doña Cristina –quienes ya no forman parte de la
Familia Real–, Carlos García Revenga, sigue trabajando para la
institución, pero dejará su puesto antes del 31 de diciembre.
Con el código
de conducta en vigor, García Revenga no podría haberse involucrado en el
Instituto Nóos como lo hizo, ya que en folletos de presentación de esta
entidad, se mostraba que el tesorero del instituto era "asesor de la
Casa de Su Majestad el Rey".
No hay comentarios:
Publicar un comentario