MADRID.- «Sin comentarios» fue el único comentario de la Casa del
Rey ante las informaciones sobre los correos entre Diego Torres e Iñaki
Urdangarin.
El Gobierno y el PSOE siguieron la estela de silencio de
La Zarzuela y se limitaron a pedir que se deje actuar a la Justicia. El
ministro Alberto Ruiz-Gallardón pidió a los ciudadanos que tengan «plena
confianza» en el juez y en «la independencia judicial». Lo mismo dijo
el titular de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo.
El
secretario de Organización del PSOE, Óscar López, suscribió el mismo
guion y defendió que la Justicia en este caso actúa «con total
normalidad».
Una actitud muy distinta tuvieron en otros partidos. El
diputado de IU Gaspar Llamazares reclamó a la Casa del Rey «una
explicación». En su opinión, el hecho es «gravísimo» y se acerca «cada
vez más al corazón de la Casa Real».
La portavoz de UPyD, Rosa Díez,
exigió que «actúe» de forma «urgente» la Fiscalía para aclarar la
supuesta implicación del Rey en los negocios de Iñaki Urdangarin. Es
necesario que «se verifique o desmonte» la teoría de Torres de que La
Zarzuela estaba al corriente de toda la actividad del duque de Palma.
El diputado de CiU Carles Campuzano dio un paso más y
comentó que, a la vista de la evolución del caso Nóos, «la abdicación
del Rey comienza a ser algo más que una opción».
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