MADRID.- El Rey presidió este sábado, acompañado por la
Reina y los Príncipes de Asturias, el Homenaje a los Caídos organizado
por el Ministerio de Defensa por el Día de las Fuerzas Armadas, que este
año supone la celebración más austera de la última década, al haberse
reducido la magnitud del acto principal.
A la ceremonia, que se celebró en la Plaza de la Lealtad de
Madrid, asistieron también el ministro de Defensa, Pedro Morenés, y la
cúpula militar, encabezada por el jefe del Estado Mayor de la Defensa,
almirante Fernando García Sánchez.
Este año, con el objetivo de llevar el ahorro a su máxima
expresión, Defensa ha sustituido el acto central que tenía lugar cada
vez en una ciudad diferente, por actividades en las bases y cuarteles
desplegadas por toda España.
En Madrid, hubo un izado solemne de la bandera en la Plaza de
Colón, que presidió el almirante García Sánchez, y después tuvo lugar
el homenaje a los caídos, al que asistió Don Juan Carlos. Cuando
retomó su actividad pública tras su última intervención quirúrgica, la
Casa Real avanzó el deseo del monarca por participar en esta
celebración.
Ha sido su primera actividad oficial fuera del Palacio de la Zarzuela
desde que el pasado 17 de mayo presidiera la final de la Copa del Rey
entre el Real Madrid y el Atlético de Madrid en el Santiago Bernabéu.
Dos semanas antes ya había acudido al palco de este estadio para acudir a
la semifinal de la Champions League entre el Real Madrid y el Borussia
de Dortmund del pasado 30 de abril.
Con su uniforme de capitán general de los Ejércitos, Don Juan
Carlos volvió a presidir un acto castrense. Después, los Reyes y los
Príncipes compartieron un almuerzo en Zarzuela junto a los ministros de
Defensa e Interior, el JEMAD y los jefes de Estado Mayor de los
Ejércitos de Tierra, general Jaime Domínguez Buj, del Aire, general
Francisco Javier García Arnáiz, y de la Armada, almirante Jaime Muñoz
Delgado, así como el director de la Guardia Civil, Arsenio Fernández de
Mesa.
La Casa Real ha decidido convocar este almuerzo, dado que este año
tampoco se ha organizado la tradicional recepción que el alcalde de la
localidad escogida cada año ofrecía a las autoridades civiles y
militares invitadas al acto.
Hasta ahora, el Día de las Fuerzas Armadas se celebraba con un
homenaje a los caídos y a la bandera, que tradicionalmente llegaba de
manos de un paracaidista. El año pasado, en Valladolid, ya se eliminó
por motivos económicos la exhibición de medios operativos con la que se
completaba la celebración, también con el objetivo de ahorrar.
Con todos estos cambios, Defensa ha conseguido rebajar a unos
100.000 euros la factura del Día de las Fuerzas Armadas, que en el año
2007 llegó a ser de 3,6 millones de euros.
El nuevo formato, sin embargo, permite acercar las Fuerzas
Armadas a la sociedad, ya que el objetivo es que todos los ciudadanos
que así lo deseen podrán conocer de cerca el trabajo de los militares,
en los más de 200 actos organizados por todo el país: juras de bandera
para civiles, actos deportivos y culturales y jornadas de puertas
abiertas, son algunas de las propuestas de los Ejércitos y la Armada.
El Ministerio de Defensa también ha pedido a los ciudadanos, a
través de su cuenta oficial en Twitter, que saquen la bandera de España a
las "calles, balcones y ventanas" para "celebrar" este día.
No hay comentarios:
Publicar un comentario