CÁDIZ.- El Rey Don Juan Carlos ha hecho un llamamiento a construir "más
Iberoamérica" entre los países de la Península y el nuevo continente con
el fin de potenciar la cooperación y el trabajo conjunto para superar
la actual crisis económica.
Su Majestad lanzó este mensaje durante el discurso de inauguración de
la XXII Cumbre Iberoamericana que los jefes de Estado y de Gobierno
celebran este fin de semana en Cádiz.
El monarca español reconoció que en los últimos años han surgido en
España "situaciones difíciles causadas por la crisis económica y
financiera", lo que ha provocado que el país vuelva su mirada hacia los
socios del otro lado del océano Atlántico.
"Necesitamos más Iberoamérica. Debemos concertarnos y conocernos más y
mejor, seguir explorando y poniendo en práctica nuevas formas de
trabajo conjunto, profundizando en nuestra cooperación y escuchando a
nuestros ciudadanos. Debemos esforzarnos por incorporar sus inquietudes
en el quehacer de todo el ejercicio multilateral iberoamericano", dijo.
A su juicio, es necesario que todos los países iberoamericanos se
hagan oir "con una sola voz, una voz que sea reconocible por todos y que
nos permita hacer valer el peso que nuestra comunidad debe tener".
El Rey pidió conectar esa voz "con los nuevos ámbitos multilaterales,
regionales y subregionales que han nacido en la región y llevar más
Europa a Iberoamérica y más Iberoamérica a Europa" como "un nuevo reto
que tenemos por delante".
Progreso de las sociedades
Su Majestad recordó la época del descubrimiento de América y el papel que entonces jugó la ciudad de Cádiz como puerta de entrada entre los dos continentes. Recalcó que los cinco siglos que han transcurrido desde entonces han puesto de manifiesto que "españoles y americanos demostramos cómo trabajando y soñando juntos podemos alcanzar metas de extraordinaria relevancia para el progreso de nuestras sociedades que, además, sirven de inspiración en otras latitudes".
En este sentido, apeló al espíritu liberal de las Cortes de Cádiz y
la Constitución de 1812 como el espíritu sobre el que posteriormente se
han levantado "las bases de los regímenes de libertad y democracia".
El Rey celebró que en los últimos años los países de Iberoamérica han
evolucionado y mejorado a pesar de la crisis económica, porque "el
continente crece, se reducen los índices de pobreza y hay una mayor
cohesión social".
"Es verdad que aún persisten las desigualdades. Ya
desde hace tiempo se inició la senda para reducirlas. Hoy, una clase
media pujante lucha por encontrar su sitio en esta nueva sociedad",
recalcó.
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