Corinna en el punto de mira

MADRID.- La Familia Real se está viendo envuelta en una auténtica tela de araña a causa de la reciente aparición de la Princesa Corinna, la posible imputación de la Infanta Cristina y la entrevista de Henar Ortiz, tía de Doña Letizia. Tres frentes y muchas historias escondidas.

   Desde la famosa cacería del Rey en Botswana, la figura de Corinna vio la luz y ahora su vida está siendo diseccionada. En esta semana rosa, hemos podido saber que fue ella la encargada de organizar la luna de miel de los Príncipes de Asturias. Una amiga cercana de la Princesa ha sido la encargada de contar a Vanity Fair los duros momentos que pasó mientras planeaba cada detalle del viaje para que ningún dato fuera transcendido. Este favor, le valió una posición de favoritismo frente al Rey, el cual empezó a contar con Corinna y su agenda de contactos para temas de Estado.

    De Corinna a la Infanta Cristina. Supuestas discrepancias entre la Fiscalía Anticorrupción y el juez Castro pusieron en pie a media España con la posible imputación de la Infanta. Faltaba tan solo un acta de reunión de Nóos para poder inculpar a Cristina, aunque rápidamente el juez desmintió que fuera a llamar a la Infanta y negó saber nada de unas actas. Un continuo ir y venir de información que resulta no ser cierto casi nunca, ¿por qué será?

    El tercer frente abierto llega de la mano de Henar Ortiz, la tía de la Princesa Letizia. Ha concedido una entrevista a la revista Vanity Fair donde cuenta que no cree que su sobrina esté preparada para reinar, aunque duda que la posibilidad le llegue teniendo en cuenta la situación en la que se encuentra España ahora mismo. Quizá el motivo de tal desconfianza sean las amenazas que dice empezaron a recibir tras el anuncio de compromiso del Príncipe Felipe con Letizia.

 Unas declaraciones con un poco de cal y otra de arena, ya que describió a su sobrina como una "mujer brillante, disciplinada, muy inteligente, con gran capacidad de trabajo, sacrificio y superación". Eso si, no podía acabar sin disparar otro dardo. Declaró que "probablemente vendería" las fotos de la primera boda de la Princesa Letizia por 600.000 €.