martes, 2 de abril de 2013

Las dudas sobre la herencia del Rey, otro golpe para la Monarquía

MADRID.- Un nuevo escándalo acecha a la Familia Real española, cuya imagen se ve cada vez más deteriorada. El último palo son las dudas sobre la herencia que el Rey Don Juan Carlos recibió de su padre y que según publicó El Mundo se hizo efectiva mediante una cuenta en Suiza que parece que ser que aún no ha sido cancelada, recuerda hoy 'El Boletín'.
Ante estas informaciones, varios grupos parlamentarios han mostrado ya su intención de pedir explicaciones al Gobierno respecto a este asunto: PSOE, UPyD, IU, ICV y BNG. Sin embargo, el órgano que da luz verde a estas preguntas es la Mesa del Congreso, que siempre se ha mostrado muy reticente a las cuestiones relacionadas con la Monarquía.

La Mesa del Congreso se reunirá mañana para dilucidar si aceptarán dichas preguntas, pero fuentes del PP dudan ya de que el órgano encargado decida tramitarlas. Presumiblemente, alegarán que no se pueden calificar preguntas realizadas con posterioridad al sábado previo, con lo que la cosa se retrasará hasta el 9 de abril, cuando se espera que pidan la reformulación de las cuestiones para ganar más tiempo.

El órgano podría justificarse en que la Casa Real no está sometida al control del Parlamento, por lo que todas las preguntas referentes a la Monarquía deben dirigirse al Ejecutivo. Un argumento que ya utilizó el PSOE cuando tenía la mayoría.

Precisamente, los republicanos de la formación socialista eran hasta ahora un grupo minoritario dentro de las filas del partido, pero la crisis actual de la Monarquía española les ha llevado a ganar protagonismo.

Según publicaban ayer varios confidenciales de Internet, los responsables de las Juventudes Socialistas pretenden introducir el debate monárquico en el partido en el foro previsto para mayo y en la conferencia que se celebrará en octubre.

Pero ésta sería tan sólo la última de las manifestaciones públicas de miembros del PSOE críticos con el Rey. Parece que muchos apoyan la posibilidad de ‘impulsar’ la abdicación de Juan Carlos I, en favor del príncipe Felipe. Una posibilidad, planteada en principio por el secretario general de los socialistas catalanes, Pere Navarro, que fue descartada rápidamente por Ferraz y por Rubalcaba que manifestaron su desacuerdo con la idea.

Poco después, el número dos del socialismo valenciano, Francesc Romeu, planteó directamente en su blog que, con la actual fórmula de Jefatura del Estado desacreditada por el ‘caso Noos’, los negocios de Urdangarín, Corina y los deslices de Juan Carlos, la república sería la mejor fórmula. La actual dirección del PSOE madrileño, y el propio Tomás Gómez, han ‘coqueteado’ también la idea sin mostrar, por ahora, un apoyo decidido a la posibilidad de plantear el cambio.

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