MADRID.- El príncipe Felipe no era excesivamente partidario de que Iñaki
Urdangarín visitara al rey don Juan Carlos en el Hospital Quirón San
José donde se recuperaba de su operación de cadera. De ahí que pusiera
como condición no salir en ningún fotografía a su lado, según ha
publicado en su web Vanitatis.com
Para no coincidir en la fotografia en la puerta
del Hopsital Quirón San José, los príncipes de Asturias llegarón quince
minutos más tarde que Iñaki Urdangarín y la infanta Cristina. La misma operación se produjo a la salida, Felipe y Letizia se retrasaron unos minutos intencionadamente para no coincidir.
Así escenificó la Casa Real una aparente normalidad que no fue tal. Parece que tanto el rey Juan Carlos, como el príncipe Felipe
no querían que la imagen de todos juntos quisiera significar para la
opinión pública que se había producido el perdón a Urdangarín por el
caso Nóos.
Las críticas sobre la Casa Real han vuelto a aflorar tras la visita,
al aceptar el monarca la visita de su yerno tras una conversación
telefónica con la infanta Cristina que contó con el apoyo de la reina Sofía y de su hermana la infanta Elena.
Tanto en las redes sociales, como en las tertulias televisivas no se
explican la razón por la que el Duque de Palma aparece en público en
estos momentos, cuando el fiscal le ha pedido una fianza de cuatro
millones de euros por malversación de caudales públicso,prevaricación,
fraude y falsedad documental.
Ante las diferentes interpretaciones que se han mostrado tras la
visita de Urdangarín al Rey, la Casa Real ha hecho público un comunicado
en que dice “no hay que buscar ninguna interpretación. Era un deseo de
la infanta doña Cristina el poder
estar con su padre tras la operación. Ella misma le comunicó que iría
con el duque de Palma y Juan, el hijo mayor, y el Rey dijo que sí. Es la
única lectura que hay que hacer de que aceptara esa propuesta”.
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